Seguro que te has encontrado con alguien en algún momento que oscilaba de forma casi repentina entre un estado de ánimo y otro. Es más, puede que a ti mismo te haya ocurrido algún episodio de inestabilidad emocional, llevándote de la euforia a la tristeza en cuestión de minutos.
¿A qué se debe ese cambio tan rápido? ¿Cuál es su origen, cuáles sus consecuencias y qué podemos hacer para que no se reproduzca? Si quieres encontrar respuestas a todas estas preguntas sigue leyendo porque hoy te hablamos de todo ello. Toma nota.
Inestabilidad emocional: ¿cuándo es un problema?
Hemos de tener claro que estar unos días más alegre que otros en los que nos encontramos más tristes es algo completamente normal y que no supone ningún problema. Nuestras emociones están ahí con el objetivo de hacernos experimentar sensaciones adecuadas a cada momento, de comunicarnos y, por supuesto, de sobrevivir.
Es por eso que el hecho de que exista cierta fluctuación en nuestro estado de ánimo en función de aquello que nos ocurre no solo es normal, es incluso necesario. El problema puede surgir cuando nuestras emociones dejan de ser adaptativas, es decir, no son acordes a nuestras experiencias, y cuando nos dejamos llevar excesivamente por ellas, cayendo en conductas inadecuadas y extremas que nos pueden causar problemas de convivencia.
Así, las personas que padecen inestabilidad emocional, pasan de un extremo a otro sin motivo aparente y con una intensidad desaforada que no se corresponde con el contexto. Oscilan de una alegría inconmensurable a la más profunda de las tristezas sin ningún tipo de mesura o equilibrio, causándoles malestar y desorientando completamente a la gente de su entorno.
Causas de la inestabilidad emocional
Las personas que sufren de inestabilidad emocional no siguen un patrón fijo, ya que existen infinidad de factores que pueden variar de una a otra. Sin embargo, algunos de los más habituales son:
- Traumas en la niñez. Cuando se han sufrido abusos o maltratos durante la crianza existen posibilidades de desarrollar inestabilidad emocional en la adolescencia y la madurez.
- Herencia. Una buena parte de las personas afectadas por inestabilidad emocional tienen ascendientes con algún tipo de trastorno del humor o de la personalidad.
Características de las personas emocionalmente inestables
Algo que define de forma general a las personas que padecen inestabilidad emocional es la baja tolerancia ante la frustración. Cuando algo no sale como ellos esperan caen rápidamente en toda una serie de respuestas conductuales muy extremas como la agresividad o la ira, o en hábitos compulsivos como el consumo de drogas o la promiscuidad.
Otras características son:
- Cambios de humor rápidos. La inestabilidad emocional provoca que cualquier estímulo presente se imponga con rapidez ante cualquier estado emocional derivado de algo pasado, aunque haya ocurrido hace apenas un instante.
- Inclinación al malestar. El hecho de ser tan susceptibles a cualquier pequeño cambio que se les plantea, hace que se focalicen en las experiencias que les llevan al miedo, la tristeza o el enfado.
- Pensamiento dicotómico. Tienen tendencia a ver la vida en un continuo combate entre blanco y negro. Al moverse constantemente entre emociones extremas, consideran que cualquier aspecto de la vida se mueve entre polos opuestos.
- Decisiones impulsivas y viscerales. Debido a ciertos problemas de comunicación y a pocos recursos para enfrentarse ante situaciones adversas, tienden a actuar sin pensar en las consecuencias y generan conflictos que tampoco saben gestionar.
- Idealización del otro. Suelen ser personas altamente dependientes que se forman una imagen mental de los demás que no es acorde a la realidad. Eso les convierte en enamoradizos que cambian de pareja con frecuencia ya que les cuesta mucho vivir solos.
- Falta de constancia. La fuerte impulsividad puede llevar a las personas con inestabilidad emocional a arrancar proyectos con gran entusiasmo y energía. Sin embargo, en cuanto atraviesan una fase de tristeza no son capaces de continuar y los abandonan.
- Dificultades para separar. Les cuesta desligar sus problemas personales del resto de sus actividades. Eso provoca que los lleven a entornos sociales o al trabajo.
- Vacío interior. Todo lo anterior puede conducir a una sensación de desesperanza vital que les ocasiona diferentes problemas en el ámbito familiar, social y laboral.
Gabineti, terapia psicológica para enfrentar la inestabilidad emocional
La inestabilidad emocional es un problema muy serio que puede alterar de forma importante nuestro día a día y conviene tratarlo con la ayuda de un especialista de la salud mental.
En Gabineti tenemos a tu disposición todo un equipo de profesionales que te ayudarán a gestionarla de la mejor manera. Nuestras consultas son online, te garantizamos una total confidencialidad, una gran flexibilidad horaria y una atención completamente personalizada y adecuada a tus necesidades para que solo tengas que preocuparte por recuperar tu felicidad.