El lugar al que vamos a trabajar siempre debería estar en un ámbito cómodo, alejado de conflictos y que nos garantice unos mínimos en cuanto a tranquilidad y estabilidad emocional. Sin embargo, esto no siempre es así, especialmente para las mujeres. Varios estudios indican que un elevado porcentaje de ellas ha sufrido situaciones de violencia y acoso sexual en el entorno laboral. Por eso resulta imprescindible la creación de espacios seguros en los centros de trabajo que garanticen y fomenten la igualdad.
En la actualidad, todavía existe una importante brecha salarial entre hombres y mujeres, también sigue vigente un techo de cristal que imposibilita la llegada de mujeres a cargos de responsabilidad y cargos directivos. Una realidad que se agrava todavía más si tenemos en cuenta la gran cantidad de situaciones violentas e incómodas que se viven cada día en los lugares de trabajo.
¿Quieres saber más sobre la necesidad de generar espacios de trabajo seguros por la igualdad y cómo podemos contribuir a crearlos? Pues sigue leyendo porque hoy te hablaremos de todo ello.
¿Por qué son necesarios los espacios seguros en los centros de trabajo?
Según la fundación SafeWork, creada para velar por la puesta en marcha de espacios de trabajo seguros en todo el mundo, la brecha salarial entre hombres y mujeres sigue en una cifra asombrosa: un 23 por ciento. Es decir: con la misma carga de trabajo y la misma responsabilidad, una mujer puede llegar a recibir una cuarta parte menos del salario.
Además, de puertas hacia dentro en empresas y organizaciones, nos encontramos con una situación muy alarmante: un 88 por ciento de mujeres, según un estudio de la misma fundación, ha recibido en algún momento algún tipo de comentario de índole sexual, machista o discriminatorio; a un 15 por ciento le han solicitado favores sexuales a cambio de algún tipo de beneficio laboral; y hasta un 25 por ciento se han sentido acosadas e intimidadas al negarse a mantener relaciones sexuales con algún compañero o con algún superior.
En todos estos casos son los jefes directos (un 55 por ciento), líderes o encargados (un 37 por ciento) e incluso clientes externos (un 10 por ciento) los causantes.
Estas cifras, que muestran un panorama desolador, indican que hay que poner una serie de medidas en marcha. La primera que promueven desde SafeWork es trabajar la cultura del “Speak-up”, es decir, hablar en voz alta, conseguir que todas y cada una de las mujeres que experimenten algún tipo de situación comprometida en el ámbito sexual, lo denuncie dentro y fuera de la compañía para que se tomen medidas.
La segunda es, por supuesto, generar un espacio de trabajo seguro e igualitario que asegure las mismas oportunidades para todos y un equilibrio laboral, mental y emocional, en el que poder llevar a cabo nuestras funciones sin amenazas ni coacciones.
¿Cómo generar y cuidar un espacio de trabajo seguro?
La base para generar espacios seguros en los centros de trabajo es incluir una serie de factores fundamentales y velar porque permanezcan a lo largo del tiempo y de manera transversal en toda la empresa.
Comportamientos y valores igualitarios
Si queremos que nuestro grupo entienda que el espacio debe ser seguro, hemos de insistir en que para ello es fundamental que el ambiente se genere entre todos, hay que buscar que se establezcan buenas relaciones, seguras, y cómodas con la igualdad como epicentro de todo.
Políticas de igualdad
Es imprescindible que las empresas destinen parte de sus recursos a poner en marcha políticas de igualdad que no se centren solo en las víctimas de acoso o de violencia, sino que vayan destinadas a todo el grupo para evitar que esas actitudes se repliquen en el futuro.
Destinar recursos a conocer mejor a cada empleado
Conocer y desarrollar las capacidades únicas de cada empleado debería estar en el día a día de cada empresa. Cuando la organización se encarga de buscar y potenciar los puntos fuertes de cada uno está ayudando a garantizar su autoconfianza y genera un mejor espacio laboral en el que todos se sienten apoyados y valorados al realizar sus funciones.
Autonomía en el trabajo
Esta es una herramienta clave ya que estaremos generando mucha confianza en el grupo, libertad e independencia, haciendo que en el grupo se generen sinergias y se asignen roles con base en sus competencias reales, más allá de un organigrama determinado.
Fomentar la retroalimentación
Para la puesta en marcha de espacios seguros es importante generar dinámicas en las que la información y la comunicación sean cíclicas y sin puertas cerradas. Intercambiar opiniones, dudas y sugerencias fortalece las relaciones entre trabajadores, ayuda a solucionar conflictos del día a día y contribuye a un equilibrio generalizado.
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