¿Tu felicidad depende de otras personas? ¿Estás en una relación y crees que si te abandona no podrás reponerte nunca? ¿Haces todo lo posible para satisfacer los deseos de un amigo, familiar o pareja olvidando incluso tus propias necesidades? En ese caso, es muy probable que tengas apego emocional o afectivo.
Si te sientes identificado con estas situaciones y quieres revertirlas, sigue leyendo. Te contamos en qué consiste el apego afectivo, cuáles son sus causas y síntomas y qué puedes hacer para gestionar y superar la dependencia emocional.
¿Qué es el apego emocional o afectivo?
El apego emocional, conocido también como apego afectivo, es aquel que genera una dependencia en las relaciones, ya sean familiares, de amistad o de pareja. Si no se trata puede afectar notablemente al bienestar de la persona que lo sufre, por lo que es importante aprender a identificarlo y gestionarlo correctamente.
¿Cuáles son las causas del apego emocional?
El apego afectivo puede tener diversas causas, entre las que destacan las siguientes:
- Educación recibida. En ocasiones, la dependencia emocional se desarrolla en la infancia, bien sea porque existen grandes carencias afectivas durante los primeros años de vida o por una excesiva sobreprotección.
- Miedo. A veces, el apego surge por el temor a la soledad o al rechazo de la persona amada.
- Baja autoestima. También puede originarse en personas con inseguridades y baja autoestima, que no confían en sí mismos y necesitan la aprobación de los demás.
- Creencias erróneas. A menudo, la dependencia emocional surge por confundir amor con sumisión y entrega absoluta a la pareja o a la persona con la que se tiene el apego.
Síntomas de la dependencia emocional o afectiva
Quienes presentan dependencia emocional pueden desarrollar las siguientes conductas:
- Idealización de la persona en la que se centra la dependencia. Solo ven sus virtudes, las cuales sobredimensionan, pero no sus defectos.
- Pánico al abandono o al rechazo. La distancia con el otro miembro de la relación les resulta insoportable, generando síntomas de ansiedad y estrés. Además, suelen tener un gran miedo a la soledad, por lo que no abandonan la relación, aunque les produzca infelicidad o estén siendo manipulados y menospreciados constantemente.
- Inseguridad elevada. Esto provoca que existan celos, desconfianza, posesividad…
- Baja autoestima. Quienes tienen apego emocional hacia la pareja, un amigo o un familiar suelen tener una concepción negativa de sí mismos. De hecho, es habitual que piensen que no son lo suficientemente buenos para la otra persona.
- Sumisión. Delegan la toma de decisiones en la otra persona, tienen dificultades para asumir responsabilidades y están dispuestos a realizar tareas o actividades que no son de su agrado solo por continuar la relación de dependencia.
7 consejos psicológicos para gestionar y superar la dependencia emocional
Reconoce y afronta el problema
El paso más importante y más complicado de dar. Es fundamental que dejes de obviar el problema, seas honesto contigo mismo y reconozcas que eres dependiente emocional de tu pareja o de otra persona.
Trabaja la asertividad…
A las personas dependientes les cuesta dar su opinión, tomar sus propias decisiones y centrarse en sí mismos. Para recuperar tu autonomía, conviene que trabajes la asertividad, es decir, que aprendas a decir lo que piensas, siempre con respeto, a quienes te rodean.
… y la autoestima
La falta de autoestima es una de las causas que originan las relaciones de dependencia. Por ello, debes poner en práctica diversas estrategias para reforzarla y aumentarla, como reservar un tiempo para ti y tus aficiones, evitar la culpabilidad o, por supuesto, tratarte siempre con el respeto que mereces. Te ayudará a mejorar tu bienestar psicológico, a sentirte mejor contigo mismo y a dejar atrás el apego emocional que tanto daño te hace.
No tengas miedo a la soledad
A veces, las relaciones de dependencia surgen por el miedo a la soledad. Es importante que dejes de temerla y aprendas a disfrutarla, ya que puede convertirse en una excelente compañera de viaje. Con el tiempo, descubrirás el gran placer de tener momentos a solas contigo mismo, ya que te permitirá apreciarte y conocerte todavía más.
Revisa tus creencias
El apego emocional o afectivo puede deberse a una concepción errónea sobre lo que es el amor y cómo deben ser las relaciones de pareja, familiares o de amistad. Analiza sinceramente tus valores, potencia el pensamiento crítico y estudia si tus pensamientos te han llevado a una dependencia emocional, un aspecto clave para poder cambiarlos.
Haz nuevos planes
Abrazar la soledad no significa que debas aislarte y dejar de relacionarte con otras personas. Atrévete a ampliar tu círculo social. De esta manera, tendrás ocasión de disfrutar de la compañía de nuevas personas, en vez de centrarte en una sola.
Busca ayuda psicológica profesional
En ocasiones es necesaria la ayuda psicológica para poder salir de una relación de dependencia emocional. Si es tu caso, sé valiente y apóyate en la psicoterapia, ya que te dará las herramientas y las estrategias necesarias para que puedas gestionarlo y superarlo.
Gabineti, psicoterapia para gestionar el apego emocional
En Gabineti ponemos a tu disposición un equipo de psicólogos especializados en apego emocional que te ayudarán, a través de sesiones online, personalizadas y confidenciales, a gestionar y superar tu dependencia afectiva.
Recuperar tu autonomía y tu bienestar es posible. En Gabineti te acompañamos para que puedas conseguirlo cuanto antes.
